La verdad es que Mbappé hizo un gran partido, lógicamente eclipsado por el dominio y superioridad absoluta del Barça. Pero el Madrid abrió el marcador con un golazo del francés, perfecto en la carrera, en el regate a Balde y en la remate a Szczesny.
Kylian Mbappé vivió con amargura su segundo Clásico como jugador del Real Madrid. Ya perdió 4-0 en La Liga el pasado mes de octubre y ahora el Madrid encajó cinco. La diferencia, aunque el delantero no se consuela con ello, es que esta vez fue el único que dejó una buena impresión entre los madridistas, mientras que en su primer duelo ante los azulgrana fue el señalado sus errores y por caer en fuera de juego.